martes, 6 de marzo de 2012

CARTAGENA - ESPAÑA


Lo bueno de  conocer personas por internet es que a través de ellas puedes conocer varios lugares del mundo. Desde hace algún tiempo vengo conociendo ya seapor videos o por referencias un lugar muy bello situado cerca del Mediterráneo Me refiero a la hermosísima ciudad portuaria de Cartagena en cuyas calles se encuentran las huellas de todas las civilizaciones que han pasado por ella desde hace 3000 años de su fundación


Historia
Cartagena fue fundada alrededor del año 227 adC por el general cartaginés Asdrúbal el Bello con el nombre de Qart Hadasth (Ciudad Nueva). Sin embargo, hay indicios de que los fenicios llegaron a nuestras costas en el siglo VIII a.C. y se cree que sobre el siglo V a.C. llegaron los mastienos que fundarían Mastia, la capital de la tribu, lo que hoy es el cerro del Molinete. Noticias de Mastia aparecen en una obra llamada Ora Maritima, del poeta latino Avieno, y también en el tratado firmado entre Cartago y Roma en el año 348 adC (Mastia Tarseion).

Cartagena fue la principal ciudad de los cartagineses en España, y de ella partió Aníbal en su célebre expedición a Italia, que le llevaría a cruzar los Alpes, al comenzar la Segunda Guerra Púnica en el año 218 adC.
El general romano Publio Cornelio Escipión tomó Cartagena en el año 209 a.C., siendo posesión romana desde entonces con el nombre de Carthago Nova y una de las ciudades romanas más importantes de Hispania. Al establecerse la presencia romana en Hispania, Carthago Nova dependió administrativamente de la Hispania Citerior. Más adelante, en tiempos del emperador Diocleciano, Cartagena llegó a ser capital de la provincia romana Carthaginiensis.

Tras la caída del Imperio de Occidente y el establecimiento de los reinos bárbaros en España, Cartagena pasó a pertenecer al Imperio de Oriente (Bizantino) durante el reinado de Justiniano I. Durante la segunda década del siglo VII los visigodos dirigidos por el rey Sisebuto tomaron y destruyeron la ciudad, causando una profunda decadencia.

Durante la dominación árabe Cartagena experimentó una cierta recuperación.

En 1245 se produce la reconquista de la ciudad, y se restaura el obispado de Cartagena, aunque unos pocos años después el obispo se trasladó a Murcia lo que no significó cambio de sede ni de denominación:Carthaginiensis in Hispania.

Cartagena experimentó una gran recuperación con el establecimiento de la dinastía de los Borbones en el siglo XVIII, periodo en el que Cartagena se convierte en la capital del Departamento Marítimo del Mediterráneo, y se construyen numerosas obras de carácter militar, como el Arsenal, las murallas de la ciudad y los diversos castillos que la rodean, así como el Hospital de Marina. En el marco de las tendencias ilustradas de la época, la ciudad llegó a disponer de un jardín botánico, que lamentablemente fue arrasado durante la Guerra de la Independencia.

En el siglo XIX el acontecimiento más importante es la revolución cantonal de julio de 1873, en que la ciudad se levantó contra el gobierno central en defensa de las tesis federalistas. El levantamiento de Cartagena tuvo gran relevancia por la importancia militar de la ciudad, que resistió hasta que en enero de 1874 las tropas del general López Domínguez entraron en la ciudad.

Durante la Guerra Civil Española de 1936-1939 Cartagena fue la única base naval que quedó bajo control de la República, y la última ciudad en caer en manos de los sublevados, el 31 de marzo de 1939. Actualmente Cartagena forma parte de la comunidad autónoma de la Región de Murcia, y es sede de la Asamblea Regional.

Una de las cosas mas llamativas del cartagenero es su forma ingeniosa de hablar ya que emplea unos modismos llenos de gracia y de expresividad ante los que tienen que rendirse los extraños. Por otra parte, si bien por simplificar dice ma por mamá, también dice, bellamente, maica. Y es que el cartagenero se mueve a sus anchas en el campo de los diminutivos, acariciándolos o formándolos de términos increíbles y es que el cartagenero echa gusto en su hablar


En Cartagena, para decir en voz baja se emplea una palabra preciosa: se dice abonico. Y frecuentemente se utiliza en diminutivo el adjetivo suave como adverbio de modo. …como ..”hablame suavico”…o “ráscame suavico?..


Disfruten del vídeo que habla sobre las maravillas de esta ciudad tan hechizante como sus habitantes…