viernes, 19 de junio de 2009

Murga...tan uruguaya como el mate y el futbol



Como el mate o el fútbol, la murga es una huella de la identidad cultural uruguaya

Este año, en una de mis acostumbradas incursiones al chat, aprendí lo que era una “chirigota”, palabra que a mi me parecía por demás muy graciosa pero mas gracioso me resulto escuchar por medio del youtube y de algunas páginas, las diferentes representaciones que hacían los que concursaban este año en el carnaval de Cádiz y que me hicieron reír por su chispa y el estilo burlón que le daban a sus letras.

Lejos estaba yo de saber que en Uruguay, existe una demostración cultural muy parecida que durante todo el año practican para salir a competir en carnavales. Mas que un grupo de canto cualquiera, los murgueros son fieles interpretes del sentir nacional. Con sus protestas han creado tantas controversias que a veces los han hecho reunirse clandestinamente…les han cerrado clubes, les han impedido que canten...pero al día de hoy no han podido acallar su voz.


.
Las prohibiciones y persecuciones pasadas, pretendieron hacer desaparecer la Murgas y mas aún, pretendieron robar su alegría y controlar la vida de quienes la cantaban….callar sus voces. Pero la Murga se hizo fuerte y encontró refugio en cada uno de los Murgueros, para resguardarse y volver a salir, como también en el interior de los barrios y villas, para que nuevamente la murga vaya recuperando las calles. Su voz estalla en los barrios azotados con lluvias de fuego en cada esquina. Sus latidos se sienten en cada bombo y en cada salto eufórico.

Un 18 de diciembre de 1999 en Mendoza, Pablo, Gamuza y Cofla eran atropellados en un festival murguero por un conductor que no quiso tolerar sus expresiones y que no valoró sus vidas…un hijo del poder que debido a como funcionan las cosas en la justicia, hoy camina impunemente por las calles. Ellos eran y siguen siendo murgueros, fueron, castigados y silenciados como muchos otros alrededor del país que permanentemente sintieron el asedio de la dictadura que imperaba. Es por eso que se escogió ese día para celebrar el Dia del Murguero. Murga. Diecisiete personas disfrazadas, sus caras coloreadas con diseños llamativos, que actúan, cantan y bailan al ritmo de bombo, platillos y redoblante. Su repertorio describe la realidad, pleno de humor, crítica punzante, sátira y emoción. Es un espectáculo cargado de color, imaginación y alegría, con silencios que juegan como recursos expresivos

La murga es la expresión más popular del carnaval.

Los temas murgueros son heredados de generación en generación, en un género que ha evolucionado con el paso del tiempo, pero que mantiene incambiada su esencia desafiante y transgresora. Son cantados en cuatro timbres de voz: primos, sobreprimos, segundos y bajos.


El carnaval uruguayo, teatral por excelencia, históricamente ha expresado el sentir de las capas sociales menos privilegiadas, pero eso también ha cambiado. Lo sigue expresando, pero ahora en colectivos repletos de diversidad, que emprenden espectáculos artísticos de la mejor calidad.
Historia y origen de la murga uruguaya

La actuación de una murga tiene cuatro momentos. En la presentación, comunica brevemente su historia y su propósito en un nuevo carnaval. Luego vienen los dos momentos histriónicos, que a su vez son de humor crítico: el popurrí y el cuplé. Finaliza con la retirada, cargada de sentimiento, mezcla de nostalgia y esperanza, que cuando conmueve, perdura en la memoria colectiva y es evocada por el público.

HISTORIA DE LA MURGA EN URUGUAY


La murga uruguaya tiene su origen vinculado a la murga de Cádiz, donde según cuenta la historia a principios del siglo XX llegó hasta Uruguay una chirigota llamada “La Gaditana que se va”.
Hasta ese entonces las agrupaciones del carnaval más parecidas a lo que es la murga uruguaya de hoy en día se llamaban “troupes”, que eran conjuntos que interpretaban canciones con ritmos musicales clásicos.

Las murgas del Uruguay tienen un formato similar a las murgas españolas de Tenerife, Islas Canarias y de Las Palmas, siendo una especie de operas donde se combinan letras de humor y protesta, músicas, arreglos corales, puesta en escena, vestuario y maquillaje.

El carnaval uruguayo es una de las máximas expresiones culturales del país y se desarrolla durante todo el mes de febrero y los primeros días de marzo, donde además de corsos y escenarios en los barrios se lleva a cabo un concurso con jurado y premios.

Las diferentes etapas del concurso se desarrollan en un hermoso escenario de la ciudad de Montevideo llamado “Teatro de Verano”, cuyas instalaciones pueden recibir hasta 5.000 espectadores y donde cada noche de carnaval se ve colmado de público.

Murga uruguaya y murga porteña


Las diferencias con la murga porteña (Buenos Aires) son bastante grandes ya que la murga uruguaya contiene letras y canciones durante los 45 minutos del espectáculo que apuntan al humor y la crítica, mientras que la murga porteña es más una expresión callejera basada en el baile.

Diecisiete personas disfrazadas, sus caras coloreadas con diseños llamativos, que actúan, cantan y bailan al ritmo de bombo, platillos y redoblante. Su repertorio describe la realidad, pleno de humor, crítica punzante, sátira y emoción. Es un espectáculo cargado de color, imaginación y alegría, con silencios que juegan como recursos expresivos.

La murga es la expresión más popular del carnaval.

Los temas murgueros son heredados de generación en generación, en un género que ha evolucionado con el paso del tiempo, pero que mantiene incambiada su esencia desafiante y transgresora. Son cantados en cuatro timbres de voz: primos, sobreprimos, segundos y bajos.
El carnaval uruguayo, teatral por excelencia, históricamente ha expresado el sentir de las capas sociales menos privilegiadas, pero eso también ha cambiado. Lo sigue expresando, pero ahora en colectivos repletos de diversidad, que emprenden espectáculos artísticos de la mejor calidad.

La actuación de una murga tiene cuatro momentos. En la presentación, comunica brévemente su historia y su propósito en un nuevo carnaval. Luego vienen los dos momentos histriónicos, que a su vez son de humor crítico: el popurrí y el cuplé. Finaliza con la retirada, cargada de sentimiento, mezcla de nostalgia y esperanza, que cuando conmueve, perdura en la memoria colectiva y es evocada por el público.

Videos de algunos murgueros:

.




sábado, 6 de junio de 2009

Y AHORA...VENEZUELA



..Y SU ORQUESTA SINFONICA
SOLO LO MEJOR DE LO MEJOR